Este año el corso de las ciudadelas tuvo dos horas de atraso, mucho más que en 2010. Estaba previsto para las 15:00, pero comenzó a las 17:00 sobre una de las vías del cuarto anillo y la avenida Brasil con dirección a la av. Tres Pasos al Frente, mientras que tenía que terminar a las 18:30, sin embargo se extendió hasta más de las 20:00.
Según la Federación de Comparsas Carnavaleras de las Ciudadelas (Feccci), el corso se retrasó porque las tres reinas de las ciudadelas, Tamara Morra (Plan Tres Mil), Vanesa Canido (Pampa de la Isla) y María José Núñez (Villa Primero de Mayo), estaban siendo peinadas en el salón de Ninón cuando ya se acercaba la hora en que debían salir las carretas jaladas por los bueyes. Sin embargo, el derroche de las más de 40 comparsas inscritas para este año cambió el rostro del público por sonrisas y gestos de alegría.
Con el ritmo contagioso del ballet Amistad, dirigido por el profesor José Luis Ayala, se dio el inicio a un corso que se destacó por rendir homenaje a Santa Cruz de la Sierra por los 450 años de su fundación.
“Estamos en Carnaval y todo se acepta”, dijo una mujer disfrazada como la Loca Jarichi respecto a las dos horas de atraso, mientras acompañaba a los Tarechis.
La presidenta del Concejo Municipal Desirée Bravo estuvo presente y aplaudió a los comparseros. Al final no faltó la famosa verbena popular.
Lo más curioso
Fallas. Como es habitual cada año, los carros tuvieron algunos desperfectos. La comparsa de los Andariegos Jrs. tuvo que sumarse a los
Indecisos porque la llanta de la carreta falló. La reina de los Cambas Solteros, Ulice I, pudo bajarse de su carreta a tiempo antes de que ésta se vaya abajo.
Público. La gente sacó sillas, sillones y hasta tocos a la vía. Aplaudió, gritó y se mostró amable con los comparseros. No faltaron las espumas y los globos con agua. Fue la parte más positiva de la jornada.
La duda. La organización no se puso de acuerdo cuando se le interrogó sobre el retraso del corso. Uno dijo que fue porque las reinas
seguían en el salón de belleza y otro indicó que no se podía empezar porque las autoridades municipales no llegaban.
¿Tradición? Hubo un intento de rendir homenaje a la ciudad, pero faltó más entrega casi en la totalidad de las alegorías. Algunos sí se lucieron, pero a otros les faltó creatividad.
Originarios. Algunos grupos de las provincias, como los ayoreos, los chiquitanos y los guarayos, se mezclaron entre los comparseros y también saltaron al son de la música.
Tamara I derrochó alegría. Tamara Morra, reina de las tres ciudadelas, logró encender al público, mientras se lucía en su carro que tenía como alegoría los 450 años de la fundación de Santa Cruz. La aplaudieron y también la ‘bañaron’ de piropos
Soberanas, bueyes y furor
La reina de la Pampa, Vanesa Canido, fue la primera en el recorrido.
Achachairú para todos
La reina de los Bacanes, Vera Lucía Valle I, lanzó frutos y no se cansó de bailar. Le regaló unos cuantos a la concejala Desirée Bravo. Ella se lo agradeció
Reina de los girasoles
La soberana de la comparsa Parranderos, Yoselin I, fue una de las más entusiastas. Levantó las manos, envió besos y compartió con la gente sin parar
No hay comentarios:
Publicar un comentario