Oruro ya vive su Carnaval con intensos preparativos

Las calles se llenaron de fe, música y danza

• Miles de danzarines rindieron su homenaje de fe a la Virgen del Socavón

La ciudad de Oruro ya vive su Carnaval, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, con intensos preparativos para la realización del Sábado de Peregrinación en honor a la Virgen del Socavón, que se efectuará el 21 de febrero próximo.

Las calles de la capital, el pasado sábado y domingo, se inundaron de fe, colorido, música y danza, con la procesión de cirios en devoción a la Patrona de los mineros y Reina del Folklore, y con la participación de las instituciones afiliadas a la Asociación de Conjuntos del Folklore de Oruro (ACFO) que se apoderaron de las principales vías para ultimar detalles respecto a la coreografía y resistencia, en más de tres kilómetros de recorrido.

El acontecimiento central del fin de semana fue la procesión de Cirios que se efectuó al final de la tarde y parte de la noche del domingo, cuando miles de personas recorrieron las calles del centro de la ciudad, portando en sus manos velas (cirios) que sirvieron para iluminar la ciudad en peregrinación hasta el Santuario de la Virgen del Socavón, como señal de respeto y amor en la víspera del día de la Candelaria.

ENSAYOS
Mientras tanto, el pasado sábado en la tarde y la noche, domingo en la mañana y primeras horas de la tarde, los distintos conjuntos folklóricos efectuaron el penúltimo ensayo con miras al Carnaval de Oruro, que se caracterizó por los largos recorridos que tuvieron la misión de medir la resistencia física de los danzarines, de las distintas especialidades de danza que tiene la Obra Maestra.

Las calles se congestionaron, en medio de la protesta de los conductores de vehículos públicos y privados, que tuvieron que tomar rutas alternas para llegar a destino.

Por otro lado, numerosos espectadores ocasionales se apostaron en las distintas calles para observar el paso de los conjuntos, se notó que la emoción reinaba no sólo en los danzantes, sino también en el público que bailó, cantó, aplaudió y lloró al escuchar las melodías que salían de los instrumentos, de las bandas de música, que también pusieron su cuota para alegrar a propios y extraños.

En esta época del año, como ya es costumbre en la Capital del Folklore de Bolivia, los orureños se olvidan de los problemas del país y se ocupan de la organización de su majestuoso Carnaval, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, envidiada en otras regiones, porque es en Oruro donde la fe hace que se viva esta fiesta con un sentimiento único, y es cuando el corazón se paraliza al escuchar las distintas melodías, al danzar y con un desborde de sentimientos inenarrables, llegar a los pies de la Virgen del Socavón.