Al menos 30.000 bailarines, entre nuevos y antiguos, recorrerán mañana cinco calles de la ciudad de La Paz para realizar su promesa al Señor Jesús del Gran Poder, de cara a la Entrada del próximo sábado.
El recorrido empezará a las 8:00 en la calle Nataniel Aguirre, y seguirá por la Max Paredes, Buenos Aires, Vicente Ochoa, Antonio Gallardo y nuevamente por la Max Paredes hasta llegar a la plaza Marcelo Quiroga Santa Cruz.
“La promesa se realizará en el templo antiguo (calle Gallardo). En ese momento cada uno de nosotros, y de forma personal, haremos nuestro compromiso a Jesús del Gran Poder”, comentó Pablo Bautista, vicepresidente de la Asociación de Conjuntos Folklóricos del Gran Poder.
Según la tradición, los nuevos danzarines prometen al Tata bailar tres años seguidos y los antiguos le piden bendiciones, perdón y agradecen los favores recibidos el último año.
“La promesa es el compromiso que tienen los folkloristas de llegar hasta el Tata del Gran Poder. Los nuevos piden continuar bailando y los antiguos van ratificando sus promesas”, dijo Bautista.
Entre la fe y la diversión
No obstante, de diez fraternos de diversos conjuntos con los que habló Página Siete, seis aseguraron que bailan sólo por diversión pero que a la vez respetan la fe de las demás personas.
Los otros cuatro aseguran haber prometido bailar tres años seguidos si se cumplía lo que habían pedido.
“A mí me gusta bailar. La verdad es que he prometido porque mi mamá estaba mal, y éste es el tercer año que bailo. Mi mamá se ha sanado, es decir el Señor me ha cumplido”, contó María Guzmán.
Con respecto a que no todos los fraternos bailan por fe, Bautista afirmó que el Gran Poder es una fiesta incluyente, que no discrimina a nadie. “En la Entrada vas a ver bailar cristianos, católicos, ateos. Vas a ver personas con capacidades diferentes, no vas a necesitar ser paceño, Dios nos quiere a todos por igual”, dijo.
Bautista también explicó que la Entrada del Gran Poder no se lleva a cabo en honor a algún santo o una Virgen, sino a la Santísima Trinidad -Padre, Hijo y Espíritu Santo-, es decir que “se baila ante Dios, pues se considera que es una comunión directa con el Señor”.
Con relación a los aspectos logísticos y de organización, la asociación espera para mañana la asistencia de cientos de personas del interior y el exterior, tanto bailarines como espectadores. Aunque para la Entrada del próximo sábado la cantidad se multiplicará.
Esta preentrada se extenderá durante todo el día y culminará con recepciones sociales de cada bloque de danzarines.
Testimonios
Lorena Zurita Danzarina de San Simón Bueno, en el Tata sí creo. En los dos años que he bailado he hecho mis peticiones y agradecimientos en el momento en el que pasé por donde está él. He prometido, he agradecido y también he pedido. Mi promesa fue bailar cada vez que pueda y cada que el Señor del Gran Poder me lo permita, a cambio de que me ayude en mis estudios y que mi familia siempre tenga salud.
Siempre me cumplió y siempre le agradecí por todo lo que me dio.
lindsay méndez Danzarina de ENAF Yo bailo ya hace varios años. En cuanto a las promesas, nunca he podido prometer nada en la fiesta de Jesús del Gran Poder porque pienso que no se puede hacer dos promesas. Yo bailo en el Carnaval de Oruro y también soy muy devota de la Virgen del Socavón. A ella le he pedido bendiciones y le he agradecido favores por todo lo que me ha dado y año tras año bailo con más devoción.
En el Gran Poder respeto la fe de las demás personas, porque es en lo que creen, pero yo nunca he prometido nada.
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